Aire más sano gracias al nuevo sensor Air Quality.
El sensor de calidad de aire VOC a 230V programable a distancia supervisa constantemente la calidad del aire en la estancia detectando los cambios e indicándolos de manera simple e intuitiva.
El sensor VOC mide la proporción de compuestos orgánicos volátiles en el aire, que se utilizan para aproxima un valor de CO2.
El estado y los cambios en la calidad del aire de la estancia son indicados, bien visualmente a través del semáforo LED integrado en la lente, acústicamente mediante un pitido o cerrando un contacto de relé integrado.
Si la proporción de CO2 contenida en el aire supera el valor aproximado de 800 ppm, el color cambia a amarillo.
Un nuevo aumento a más de aproximadamente 1200 ppm activa una alarma, en cuyo caso la lente cambia su color a rojo, suena una señal acústica y el relé se cierra.
Si la concentración de VOC desciende, mejorándose la calidad del aire, el color de la lente cambiará de rojo a amarillo y finalmente a verde, el pitido cesa y el relé se abre de nuevo.
Además, el nuevo OCCULOG-1C-FT permite su programación y la modificación de los valores límite a distancia utilizando la aplicación gratuita B.E.G. One (Android e I.O.S) y el Adaptador IR-BLE para smartphones. Alternativamente, la programación puede hacerse vía el mini mando a distancia IR-OCCULOG-1C suministrado de serie.
Por su polivalencia, fiabilidad y sencillez de uso, el nuevo sensor OCCULOG-1C-FT de B.E.G. es la solución ideal para supervisar la calidad de aire en aulas, oficinas, centros comerciales, hoteles y residencias de la tercera edad entre otros.
Fuente: B.E.G.
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